jueves, 26 de febrero de 2009

Zapatero pide respeto para Garzón, pero... ¿a quién respeta Garzón?


Mientras seguimos en época preelectoral, sigue en danza el culebrón "Gürtel", una instrucción del Juez Garzón que está trayendo mucha cola.
Ayer mismo, tras demasiadas concesiones, era el Partido Popular quien presentaba la querella por prevaricación al Juez Garzón. Sin embargo, una querella por prevaricación es difícil de presentar y de que prospere, sin que esta lleva aparejada la de cohecho. Resulta siempre difícil demostrar que existe intencionalidad en la acción judicial, en especial porque el juez tiene la facultad de dirigir su propia actividad jurisdiccional y ordenarla como entienda convencional, esta autonomía se debe de utilizar con eficacia y en busca de los mejores resultados, siguiendo siempre los principios y dictados de la ley.
En estos momentos tan delicados , el juez ha dirigido su instrucción y nadie puede vincular que esta actividad jurisdiccional se haya dirigido contra el PP sino para asegurar y garantizar el proceso. Sin embargo, los plazos, las filtraciones, la imputación de aforados y la escasa incidencia entre los imputados del ingreso de prisión, hacen ver que algo no es normal, y sobre todo, que se busca ser el titular de algún telediario o todos los telediarios más bien.
El CGPJ, lejos de poner un poco de cordura en este tema, se ha limitado a enfocar el tema como una falta de respeto a la actividad jurisdiccional y al ejercicio de ésta. Sin embargo, no se está entrando más que en la legitimidad del juez a ejercer la actividad jurisdiccional ordenando ésta de la forma que estime oportuno. Lo que desde un punto de vista formalista es muy correcto, pero se olvidan que en este caso se está creando alarma social porque se están llevando las cosas a una zona donde esta instrucción se está convirtiendo en un "reality show" donde todos pueden opinar, porque lo único que se deduce es el famoso "sólo sé que no sé nada". Y esta situación sólo hace mal a la justicia, su carácter incómodo con el que ha nacido ha impregnado el ambiente y ha desarrollado una línea de provocación y una causa general contra el PP, cuando se trata al parecer de una trama de corrupción que puede salpicar a personas del PP.
En este orden de cosas, era el Sr. Zapatero, quien lejos de ayudar aportaba su grano de arena, afirmando que se está faltando al respeto a los jueces y que la querella era una forma de intimidación para querer "amilanarse" a un juez con potestad jurisdiccional.
La aseveración podría ser cierta si no se hubiera convertido en un culebrón y si no hubiera caído en manos del Sr. Garzón un Juez que hace su Justicia ineficaz de causas perdidas de cara a la galería, porque lo que le interesa es el impacto social de su dimensión personal y judicial.
Sobre este tema, era el propio Pérez Rubalcaba, quien molesto con que haya sido llamado a explicar las aficiones de sus altos cargos de la policía judicial en la caza y a las cenas en marisquerías con ministros y jueces de la Audiencia Nacional, afirmaba que se tenía miedo a Garzón y no entendía porqué, que se trataba de un juez más y que actuaba en nombre del Derecho y que se le quería amedrentar.
Sin embargo lo que no entendemos los mortales es porqué quiere este juez manipular hasta a la fiscalía anticorrupción fijándole los plazos de sus conclusiones, (intentando que estuvieran preparadas para el viernes), de este modo quedaría liberado para poder soltar "lastre" en la jornada de reflexión , por supuesto contra el PP. Tampoco entendemos como le cunden las instrucciones, como se filtran estas, como las compagina con cacerías y monterías con cazadores furtivos, como no se inhibe cuando sabe o dice saber que hay aforados, como sabe tanto derecho para alargar el procedimiento garantizando su duración y no sabe a quien debe remitir las actuaciones y cuando inhibirse.
Lo peor es la imagen que está quedando de una justicia discrecional, política y espesa, que le ha tocado por suerte a un Juez que se ha presentado por el PSOE y que se iba a brindar en cacerías por la victoria del PSOE los próximos 20 años.
¿no creen ?

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