La corrupción empieza con la financiación autonómica.

Nuestro país se encuentra sumido probablemente en la crisis más aguda que hemos conocido en los últimos tiempos.
Sin embargo, la actitud pasota del fundamentalismo de la zeja, ha permitido, de un lado, que nadie confíe en la recuperación de la economía española; y de otro, que sea más difícil que nunca "encajar" la deuda.

De estas cuestiones, que tienen muy al margen a la población, se debe decir, que es algo parecido a lo que ocurre con una empresa que no va bien, que hay rumores de no pagar bien y además se presiente que está manifiéstamente mal gestionada.
Desde esta perspectiva, está claro que nadie quiere dar crédito a alguien así, ni se le fía ni se le da crédito.
Esa es la realidad del desbarajuste económico creado por Rodriguez Zapatero, quien no domina la economía, está dando unos pésimos datos, está haciendo un mal diagnóstico de las circunstancias que los motivan y aún peor remedio. Y por encima de todo se está endeudando hasta los ojos, con una clara tendencia al despilfarro, que sólo es un guiño a la galería para mantener el status quo, presumiendo de una pretendida política social, mientras se descompone la economía por momentos con los nefastos efectos para todos sin excepción.

No lo podía hacer peor nuestro amigo, sino corrompiendo el sistema desde dentro; muchos somos los que pensamos que no era momento de replantear el sistema de financiación autonómico y menos de ampliarlo; y por desgracia, es lo que pretende este desalmado.

Lo gracioso es que su sistema de ampliación se ha cimentado en congraciarse con sus estados de taifas peninsulares y buscar apoyos tan esenciales como los del tripartito nacional socialista catalán, así no es de extrañar que desde el PSOE se considere un logro y desde sus socios nacionalistas sea la victoria a un pulso echado al Estado español, que como siempre dirigido por el iluminado Zapatero resulta perdedor.
Es perdedor, porque en primer lugar otorga más de lo que pedían sus socios, primera derrota, hace que paguen más a Cataluña los súbditos españoles ( en contraposición a los catalanes) y en tercer lugar , pierde porque favorece el camino hacia el Estado Catalán, una auténtica barbaridad discursiva de la que es partícipe R. Zapatero por incompetente y "meapilas".

Pero lo que resulta peorado es el propio sistema , que se corrompe, en favor de una negociación partidista , interesada, irreal, sectaria , insolidaria y arbitraria

Pero aún es más vergonzoso el escaparate montado por la millonaria en subvenciones , que no en ideas ,Pajin; quien afirma que las Comunidades gobernadas por el PP salen perjudicadas por no hacer los deberes, aquellos que ha impuesto R. Zapatero a los votantes y que es ser súbditos del fundamentalismo de la Zeja, un hecho casi doloso en una democracia bananera como la creada por R. Zapatero y consentida por el PP.

Aún me pasma más, la genialidad del presidente , quien pide que se aclare el PP, cuando es él quien no se aclara con lo que dice, ya que no se quiere despilfarro financiero autonómico, pero si se ha de dar dinero y ampliarse, son esas comunidades las que demandan más, porque es en este injusto reparto, a las que se menoscaba y desprecia.

Es un despropósito tal, que se castiga a unos españoles frente a otros, que se discrimina entre españoles y se pisotea una posible resolución constitucional, que se ve aún más mediatizada a serlo de soslayo de un sistema predefinido y preordenado para que una encorsetada judicatura constitucional de un visto bueno.